CIRCULO DE MUJERES
El círculo desafía la lógica social tradicional de la jerarquía. Un círculo de mujeres es una dinámica en donde un grupo de dos o más mujeres se reúnen en forma circular a comunicarse a través de energía compasiva y amorosa.
La dinámica es muy sencilla, formamos un círculo y en el centro ubicamos un altar en el que ponemos flores, velas, agua, cristales, o simplemente el vacío como símbolo de centro energético del círculo. En algunas oportunidades fijaremos un tema con anterioridad o simplemente hablaremos de lo que nos corresponda. Una vez formado el círculo, cualquier decisión relevante se ha de tomar por consenso. Para que eso funcione debe imperar la sinceridad.
A medida que el círculo gira, cada mujer, al llegar su turno, habla mientras las demás la escuchan. Para esto usamos un objeto de la palabra, el cual va girando en el círculo. Quien tiene el objeto tiene el turno de expresarse ya sea a través de la palabra, el cuerpo o el silencio, todas son formas de comunicar.
Para que un círculo de mujeres sea un lugar seguro debe constituir un espacio uterino capaz de acoger nuevas posibilidades, donde la mujer y su sueño encuentren apoyo cuando éste no sea todavía más que un esbozo sin definir, cuando la psique de la mujer esté preñada con una idea de lo que podría llegar a hacer o a ser.
El miedo al ridículo aborta aquello que podría haberse desarrollado; la indiferencia lo priva de alimento. El círculo seguro acoge el sueño de esa mujer confidencialmente y sustenta la posibilidad de que se realice. A pesar de su poder curativo, el circulo no es una terapia, por eso, no tiene inicio ni final, ni un objetivo terapéutico o clínico específico, sin embargo, puede ser un maravilloso complemento de la terapia individual o de pareja, al ser un espacio catártico, de apoyo y escucha.