Así como el amor crece cuando se comparte, también la prosperidad lo hace. Y es por ello que queremos regalarles a todos nuestros seguidores algunos consejos para que la abundancia de lo bueno en todos los aspectos de la vida los acompañe hoy y siempre.
Limpieza y orden
Para que en nuestra vida entren cosas nuevas, es importante primero "limpiar" física, mental y emcionalmente todo aquello que ya no necesitamos. En el plano físico, deshacernos de aquellas cosas que ya no necesitamos. Si están en buen estado, además será una buena forma de compartir con quienes no están pasando un buen momento.
Limpieza del hogar
En el plano energético, podemos hacer una limpia en nuestro hogar o negocio con un sahumado en el siguiente orden:
Incienso en grano (pasarlo por toda la casa y una vez finalizado, pasar al siguiente paso)
Romero (pasarlo por toda la casa y una vez finalizado, pasar al siguiente paso)
Lavanda en ramita (pasarlo por toda la casa y una vez finalizado, pasar al siguiente paso)
Palo santo para purificar y enraizar lo que desees.
Limpieza de nuestro propio campo energético
Si tenés bañera en tu casa, podés hacer un baño de inmersión con sal marina o si no conseguís, sal gruesa. Podés agregar si querés algún aceite esencial de tu agrado.
Limpieza mental y emocional
Liberar todo pensamiento y emoción de baja vibración, enojos, rencores, inseguridades. Trabajar la compasión y la empatía. Con esto elevaremos nuestra vibración.
Limpieza y orden de la billetera o cartera.
Así como necesitamos limpiar y ordenar nuestra casa, para que fluya la energía, también es importante limpiar y tener un orden en donde llevamos el dinero.
No llevar tickets de compra ni nada que represente gastos
En lo posible no guardar en la billetera todo aquello que represente deudas, como las tarjetas de crédito. Si eso no es posible, un consejito sería guardar las tarjetas de crédito en un sobrecito azul (el azul "enfría").
Ordenar los billetes de menor a mayor
Algunos colores de billetera recomendables para reforzar la prosperidad son el rojo, naranja o tierra.
Gratitud
Trabajar la gratitud no quiere decir que debamos repetir gracias mil veces sin sentido, sino estar conscientes de lo que sucede a nuestro alrededor, de lo bueno, en forma de dones y gracia, y de lo no tan bueno, en forma de experiencia.
Se puede hacer una lista de todas las situaciones, y cosas que nos han sucedido este año por las que queremos agradecer a nuestro Padre, Universo o fuerza divina, según tu creencia. Y también ser agradecido con aquellas personas y situaciones.
Generosidad
Al igual que la gratitud, la generosidad abre puertas a la infinita prosperidad. La generosidad no es dar sólo lo que ya no nos sirve o ocupa espacio, sino compartir lo que tenemos. No necesariamente tiene que ser en forma de dinero. Algunos ejemplos:
Involucrarse con alguna/s organizaciones sin fines de lucro, y destinar un porcentaje mensual como donación.
Voluntariado. Podemos ofrecer unas horas de un día de nuestra semana. Puede ser dar unas horas en forma de clases de apoyo para el colegio para niños que no pueden pagarlas. Ofrecernos para dar algún taller de algún oficio en algún centro cultural
Donar sangre y fomentar la donación.
Organizar en tu barrio, edificio, colegio, trabajo, la recolección de juguetes en buen estado para regalar para Navidad, para el día del Niño. O pueden ser alimentos, u ofrecer traslados, si dispones de auto, de animales que necesitan tránsito. La imaginación es el límite.
Cuidar el medioambiente y fomentarlo en la familia y amigos, para que se propague y entre todos preservemos nuestro Hogar en común.
Tratar de fomentar el crecimiento de pequeños y nuevos negocios en tu barrio. Consumiendo en ellos y recomendandolos. Compartiendo las publicaciones que pensás que podrían ser de interés para otras personas.
Apostar al consumo sustentable, apoyando a artesanos y diseñadores nuevos.
Sorprender a alguien dándole algo que necesita, algo que le gusta o desea, invitarlo a una salida. No es necesario esperar una fecha especial, cada día puede ser un buen día para darle una alegría a alguien.
Finalmente, les dejamos la oración de San Francisco de Asís, para que el amor, la paz y la alegría nos encuentre siempre.
Señor, hazme un instrumento de tu paz.
Donde haya odio, siembre yo amor;
donde haya injuria, perdón;
donde haya duda, fe;
donde haya tristeza, alegría;
donde haya desaliento, esperanza;
donde haya sombras, luz.
¡Oh, Divino Maestro!
Que no busque ser consolado sino consolar;
que no busque ser amado sino amar;
que no busque ser comprendido sino comprender;
Porque dando es como recibimos; perdonando es como Tú nos perdonas; y muriendo en Ti, es como nacemos a la vida eterna.
Gracias por acompañarnos en este 2018 y esperamos que este próximo 2019 sigamos estando en contacto para seguir creciendo entre todos. Un abrazo!
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